El pasado 2 de mayo se estrenó la película The Fall Guy (Profesión Peligro en México) en todos los cines alrededor del mundo. Esta producción contaba con un elenco estelar y con uno de los directores más cotizados del momento, David Leitch (Deadpool 2 y John Wick). En el papel principal contaban con Ryan Gosling el cual tenía una participación reciente en la exitosa película de Barbie, con diversas apariciones populares en programas como Saturday Night Live y una presentación musical en los Oscares. Esta producción fue financiada por la compañía Universal Pictures, la cual apostó gran cantidad de dinero en el marketing de esta película y con expectativas de una alta taquilla. Esta película sería el primer blockbuster en estrenarse este verano 2024 y tenía todos los ingredientes para ser un éxito brutal en taquilla. Me falta mencionar que la película recibió elogios de la crítica desde antes de que se estrenará. Sin embargo, los resultados de taquilla llegaron el lunes y fueron decepcionantes para todos los stakeholders involucrados. Es la película con la peor recaudación monetaria al inicio del verano de blockbusters desde el 2005.  ¿Qué salió mal y qué significa esto para la industria del cine en general?

La película recaudó $28.5M de dólares en su primer fin de semana a nivel doméstico (solo Estados Unidos), contra un presupuesto de $130M de dólares sin contar marketing. Es un resultado decepcionante para una producción con mucho potencial y con apoyo importante de un film studio. ¿Pero como una película como The Fall Guy falló en interesar al público en general? Una de las probables razones de este resultado de taquilla pudo ser el poco interés que hay en la serie de televisión en la cual se basa esta película. La serie de The Fall Guy se estrenó en los años 80s, protagonizada por el actor Lee Majors en el papel que actualmente tiene Ryan Gosling. Esta fue una serie popular del estilo de Misión Imposible y MacGyver, pero que no ha tenido mucha relevancia a nivel pop culture en comparación. Entiendo la apuesta de Universal Studios de utilizar una serie antigua para generar más interés en la película, pero no creo que esto haya ayudado a recaudar más taquilla.

La otra cuestión es Ryan Gosling, es un actor que no ha logrado consolidarse como gran recaudador de taquilla y su reciente éxito Barbie fue más la excepción que la regla. Sus últimos grandes estrenos Blade Runner 2049 y First Man decepcionaron en taquilla con pérdidas monetarias para sus respectivos estudios. La coprotagonista Emily Brunt sigue esta misma tendencia, su último éxito fue Oppenheimer. Este elenco tiene mucho renombre en Hollywood, pero no se ha materializado en éxitos comerciales en taquillas. Por lo que no ayudó a los resultados de la película en atraer gente nueva a los cines.

Sin embargo, la principal razón de que la película haya fallado en taquilla son los presupuestos exorbitantes que son cada vez más comunes y el entorno cambiante en la industria del cine. Estamos en tiempos oscuros para Hollywood, es cada vez más difícil predecir qué películas son exitosas. Los presupuestos son cada vez más elevados, esto empeoró con  la reciente huelga de escritores del 2023 al elevar todavía más el presupuesto de varias películas. En años recientes hemos visto películas como The Flash y Indiana Jones fracasar rotundamente en taquilla, coloquialmente denominadas como box office bombs. Ambas fueron apuestas grandes por parte de estudios de películas en IPs relativamente consolidados. El problema fue los presupuestos que se destinaron a estas películas, complicando mucho que recaudaran dinero en taquilla. La película de The Fall Guy tuvo un presupuesto de $130M, el doble del promedio para este tipo de películas. 

La industria está cambiando rápidamente y las plataformas de streaming contribuyeron a esto directamente. Se ha vuelto común escuchar que la industria de Hollywood solo estrena precuelas, secuelas o remakes de películas anteriores. Se critica mucho la falta de creatividad en la industria y el poco apoyo que se le da al cine emergente. El detalle es que hemos visto que las únicas películas que están recaudando dinero en taquilla son los blockbusters. Se ha vuelto una necesidad crear anticipación para nuevos lanzamientos y hacer un evento de ello. La gente ya no asiste al cine a menos de que sea sumamente necesario ver la película en la pantalla grande. La comodidad de las plataformas como Netflix, Max y Disney + han contribuido al bajo rendimiento de las filmaciones originales. El futuro que depara a la industria es oscuro y requiere de adaptación de todos los jugadores involucrados.